A pesar de que aún no hay una confirmación oficial por parte de la Casa Rosada, en el oficialismo se baraja llamar a sesiones extraordinarias desde el 10 de diciembre hasta finales de febrero. Se modificaría así el plan original que era solo sesionar durante diciembre.
Según pudo saber TN, el Gobierno quiere que ambas cámaras del Congreso trabajen todo el verano, sin tener un receso formal. De esta manera, algunos funcionarios esperan que las negociaciones no frenen y se mantengan activas para -en el mejor de los casos- lograr aprobar todas las reformas que propone Javier Milei.
En principio, el principal proyecto que el oficialismo quiere que se apruebe es el Presupuesto 2026, que iniciará su debate en la Cámara de Diputados. Lo ideal para más de una fuente libertaria es que la iniciativa logre media sanción en diciembre, para que el Senado pueda discutirlo en los primeros meses del nuevo año.
Pero, mientras la Cámara de Diputados negocia ese proyecto, se espera que la Cámara Alta también tenga actividad en el último tramo de 2025. Entre las medidas que podrían iniciar su tratamiento allí figuran el nuevo Código Penal y las modificaciones en la Ley de Glaciares.
El primero ya fue presentado por Patricia Bullrich y el propio Presidente en el penal de Ezeiza, pero aún no se dio a conocer la letra chica del nuevo Código. El documento reemplazará al que está vigente desde 1921, y tiene tres ejes centrales: agravamiento de penas, baja en la edad de imputabilidad y la incorporación de nuevas figuras delictivas.
Por otro lado, la modificación en la Ley de Glaciares es un pedido de algunas provincias mineras a la Nación, para que se elimine el concepto de “ambiente periglaciar” en la norma o que al menos cada provincia pueda definir qué hace con ese espacio. Los jefes provinciales que buscan este cambio fundamentan que la ley no les permite explorar ni explotar ciertos territorios porque están cerca de un ambiente periglaciar.
Los ambientes periglaciares son preservados por la Ley de Glaciares, ya que poseen hielo subterráneo y están en constante congelación y descongelación. Es decir, son claves para la reserva de agua dulce.
Los periglaciares que existen en la Argentina ya figuran en un inventario que se realizó cuando se aprobó la norma, por lo que las provincias no pueden realizar inversiones mineras ignorando esta situación e incumpliendo la ley.
Con respecto a los demás temas con los que quiere avanzar el Gobierno, las dudas surgen sobre la reforma laboral. Todavía se desconoce si ingresará al Congreso por la Cámara Alta o la Baja. Además, es una de las reformas que -por ahora- menos consensos genera.
Por ejemplo, este miércoles se dieron a conocer las resistencias por parte de la Unión Industrial Argentina (UIA) y la Confederación General del Trabajo (CGT).
Ambos actores cuestionaron los lineamientos que el Consejo de Mayo discutió en su última reunión, donde quedó expuesto que el texto aún no logra un entendimiento mínimo entre empresarios y gremios, pero tampoco con el Gobierno.
Por estas implicancias, se espera que la modernización laboral quede como uno de los últimos proyectos que discutirá el Congreso.
Además de los mencionados, en el oficialismo quieren aprobar la reforma tributaria, la Ley de Inocencia Fiscal y las modificaciones educativas.
Con la cantidad de temas en agenda, en la oposición esperan que en diciembre se traten la mayor de cantidad de proyectos pendientes -o los principales- para poder tener en enero algunos días de receso informal.
“En enero se podría cortar dos semanas, depende de cómo se avance en diciembre. En el año de la Ley Bases, la primera quincena de enero hubo guardias pasivas, no hubo legisladores. Pero todo eso depende de la marcha de los temas en diciembre. No es fácil tener a la gente sin vacaciones”, indicaron desde uno de los bloques que se mantiene distante de La Libertad Avanza.
Y agregaron: “Si diciembre no es productivo y se empieza con demoras, enero podría quedar atrapado”.
Esta postura también fue tenida en cuenta por parte del Gobierno. Según pudo saber este medio, LLA sostiene que más allá de que la convocatoria dure todo el verano, la realidad es en que en enero habría un parate legislativo.
