Ocurrió el martes, cerca del mediodía en Cerrillos y afortunadamente en ese momento no había personas dentro del comercio.
La cámara de seguridad del local tomó el momento en el que esta persona ingresó a toda velocidad con su vehículo por la entrada del kiosko, con lo cual se llevó por delante una heladera, un par de estantes con mercaderías, damajuanas y cajones de cervezas que estaban apilados.
La mujer, que tenía el casco en el brazo, se levantó por sus propios medios pese al golpe que se dio.