Este nuevo caso se suma a una preocupante serie de agresiones contra la fauna silvestre en la región. Según los primeros indicios, el tucán habría sido víctima de un disparo con aire comprimido, una práctica cruel que pone en riesgo no solo a los animales sino también al equilibrio ecológico local.
Vecinos expresaron su indignación y pidieron mayor control y sanciones para quienes atenten contra la vida de especies protegidas. “Es triste ver cómo se repite esto. Los tucanes son parte de nuestra naturaleza y merecen respeto”, comentó una residente de la zona.
Autoridades locales aún no han emitido un comunicado oficial, pero se espera que se inicie una investigación para dar con los responsables y prevenir futuros ataques.