Padres, docentes y directivos, desde hace varios años reclamaban por el mal estado de la escuela Joaquín Castellano y la situación se volvió insostenible tras las lluvias torrenciales de principios de marzo, por eso desde los primeros días del mes se empezaron a realizar las obras y los alumnos debieron volver a la virtualidad.
En este marco, cansados de las dilaciones, algunos padres decidieron pedir el traslado de sus hijos hacia otra institución; y es que, sin bien los trabajos de refacción ya han comenzado, prevén que demorarán algunos meses.
Los directivos de la escuela propusieron alquilar aulas en dos colegios privados hasta tanto las tareas de refacción concluyan en el edificio de Av. Reyes Católicos. El Colegio San Rafael y el Magnus serían las instituciones elegidas.
Fuentes cercanas a la administración del Colegio San Rafael informaron que, tal cual se anunció, las conversaciones existen y esta institución, de firmarse el acuerdo, podrá albergar a 300 alumnos entre los turnos mañana y tarde.
Recordaron, además, que no sería la primera vez que el Ministerio de Educación les alquila su edificio; años atrás, y en similares circunstancias, alumnos de la Escuela Jacoba Saravia tomaron clases allí.
