Como se recordará, el hombre fue imputado por la fiscalía como autor de los delitos de abuso sexual con acceso carnal continuado en perjuicio de S. Y. G.; abuso sexual con acceso carnal en perjuicio de C. F. R.; abuso sexual con acceso carnal y estafa en perjuicio de J. P. R. P.; abuso sexual simple en perjuicio de M. L. B.; abuso sexual simple continuado en perjuicio de M. P. G. E.; y abuso sexual con acceso carnal en perjuicio de C. A., todo ello en concurso real.
Por su parte, la querella formuló acusación en su contra por los delitos de abuso sexual con acceso carnal continuado agravado por el grave daño a la salud mental de la víctima en perjuicio de S. Y. G.; abuso sexual con acceso carnal en concurso real con estafa en perjuicio de J. P. R. P.; abuso sexual con acceso carnal agravado por el grave daño a la salud mental de la víctima en perjuicio de C. F. R.; abuso sexual simple agravado por la calidad de educador en perjuicio de M. L. B.; abuso sexual simple continuado en perjuicio de M. P. G. E.; abuso sexual con acceso carnal en perjuicio de C. A.; todo ello en concurso real.
La primera declaración que se escuchó esta mañana fue la de una joven que era expareja del acusado. Ella fue profesora en la academia desde el 2016 hasta que finalizó su relación con Rangeón.
Contó cómo comenzaron a salir, cómo era su relación, y agregó que jamás escuchó a ninguna alumna quejarse de alguna situación de abuso.
En cuanto a la relación de Rangeón con S. Y. G., dijo que ella siempre lo buscaba y lo provocaba. Agregó que incluso entraba en el monoambiente sin autorización mientras ella (la testigo) salía con el imputado. Contó sobre una carta que mandó una de las denunciantes al mail de Rangeón, y agrego que ella estaba con él cuando la recibió y la leyeron juntos.
Dijo que se siente amenazada por la denunciante y que le tiene temor. Incluso refirió que en 2016 la madre de la testigo realizó una denuncia en la Comisaría Sexta en contra de S. Y. G.. Ella tenía 17 años cuando comenzó su relación con Rangeón en 2016. Estuvo con él unos meses y después volvieron al año siguiente.
La ronda de testimoniales continuó luego con la declaración de otros testigos propuestos por las partes, entre ellos algunos miembros del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) que tuvieron intervención en la etapa de investigación.
El tribunal colegiado está integrado por los jueces de la Sala V, Gabriela Romero Nayar (presidenta), Pablo Farah (vocal interino) y Mónica Faber (vocal). Por el Ministerio Público interviene el fiscal de la UDIS 4, Pablo Alejandro Rivero. La defensa del imputado está a cargo de Luciano Romano y Fernando Díaz Zabalaga. En la actoría civil se desempeñan Sandra Domene y Jorge Agüero.
