La ciudad volvió a convertirse en epicentro de una de las manifestaciones religiosas más convocantes del país. Hubo miles de salteños que acompañaron las imágenes por las calles de la ciudad.
En localidades como Tartagal, Orán y Metán, se sumaron miles más, elevando la cifra total de participantes a alrededor de 700.000 fieles. A pesar de las altas temperaturas, la jornada transcurrió sin incidentes graves.