Hoy se cumple una semana desde que Gastón Sanz, un joven de 31 años, fue visto por última vez en la zona oeste de la ciudad.
Desde el lunes a las 16, en que su madre radicó la denuncia, se activó el protocolo de búsqueda y sigue sin aparecer. Entre la información que los salteños aportan a modo de dato para ayudar en la causa y la investigación oficial desplegada, el jueves por la tarde noche un joven se acercó a una dependencia policial para indicar que había visto a Gastón en la zona de Tres Palmeras, caminando por la zona de la Circunvalación Oeste. A raíz de esto último, el intenso y numeroso operativo de búsqueda cambió el objetivo y se dirigió hacia Las Costas y lugares lindantes.
Según El Tribuno el comisario Daniel Ríos a cargo del operativos sostuvo que en la mañana de ayer, “surgió como dato firme que lo habrían visto caminado por la zona de Tres Palmeras, por la Circunvalación Oeste", y agregó que se trata de “información brindada por un muchacho que se acercó a la Policía y manifestó haberlo visto durante la tarde noche del jueves en la Circunvalación. Recién por la noche, como a las 4, se tomó conocimiento de eso y desde la mañana del viernes se cambió el rumbo de la búsqueda hacia la zona de Las Costas, Tres Palmeras y la Circunvalación Oeste".
Hasta ayer el trabajo de rastrillaje que vienen realizando los uniformados junto a diferentes grupos operativos entre civiles y funcionarios de las fuerzas, comprendió desde el acceso al puente Castellanos, donde lo dejó la madre el domingo a las 9, hacia distintos puntos: el puente, río Vaqueros, la cima del cerro, la quebrada de San Lorenzo, también se trabajó sobre el segundo y tercer puente de Lesser y hasta el momento no hay rastros del joven.
"Es probable que Gastón ande desorientado, haya perdido el sentido de la ubicación. Ojalá sea así y lo podamos encontrar en las próximas horas", fueron los deseos del comisario Ríos a la vez que indicó que "si tendríamos que hablar de un hecho lamentable, respecto al rastrillaje donde se trabajó es casi imposible porque ya pasó casi una semana y tendrían que haber surgido indicios de algo, insisto si es que hablamos en términos trágicos, como por ejemplo olores nauseabundos, animales carroñeros que pudieran deambular en esos lugares. Pero no apreciamos nada de eso, por eso creemos que él no estaría ahí, sospechamos que pueda estar extraviado".
El tiempo no ayudó a la hora de la búsqueda, las persistentes lluvias impactaron por ejemplo en el trabajo del personal de odorología, dado que los olores son menos intensos, entre otros aspectos. En el momento de la desaparición el joven llevaba puesto un pantalón deportivo, campera deportiva, remera, zapatillas y tenía una estampita de una virgen. No tenía ningún teléfono celular ni documentación, tampoco alimento ni algún tipo de bebida.
