De este modo, una familia tuvo que obtener ingresos por $1.110.624 para no ser pobre en el quinto mes de 2025.
Por su parte el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) cayó 0,4% en mayo, un valor inédito desde que el INDEC retomó la serie de datos en 2016. Tuvo incidencia la fuerte caída en el precio de las frutas y verduras.
Hay que remontarse a 2020 para encontrar una variación negativa de la CBA. Dado que la canasta determina la línea de indigencia, una familia "tipo" integrada por dos adultos y dos niños necesitó $500.281 para no caer en la indigencia.
Sucedió en una jornada en la cual el INDEC también informó que la inflación general se desaceleró al 1,5%. La división de alimentos y bebidas no alcohólicas, la de mayor incidencia en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) trepó apenas 0,5%.
Vale recordar que el INDEC construye la CBA teniendo en cuenta lo que necesita un varón adulto de entre 30 y 60 años, de actividad moderada (adulto equivalente), para satisfacer sus necesidades nutritivas esenciales. A su vez, se seleccionaron los alimentos y sus cantidades en función de los hábitos de consumo de la población a partir de la información provista por la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENGHo).
Para determinar la CBT se amplía la CBA considerando los bienes y servicios no alimentarios. La estimación se obtiene mediante la aplicación del coeficiente de Engel (CdE), definido como la relación entre los gastos alimentarios y los gastos totales observados en la población de referencia.