Con las dificultades que implicó la cuarentena para la medición de todos los precios, el Indec dio a conocer la inflación de marzo, que se aceleró respecto de la tendencia que había reflejado en febrero. Según el organismo, la suba de precios del tercer mes del año fue de 3,3% y acumuló en los últimos doce meses un alza del 48,4 por ciento.
De esta manera, el primer trimestre cerró con un incremento del nivel de precios general de 7,8%, bastante más bajo del que podía proyectarse a fines del año pasado, pero con el riesgo de que la cuarentena dispuesta por la pandemia sumado a la alta emisión monetaria y la brecha cambiaria disparen la inflación en los próximos meses.
Según el Indec, en marzo los bienes treparon 3,2% y los servicios, 3,5%. La inflación núcleo, que registra los valores de los productos que no son estacionales ni regulados, mostró un alza de 3,1%. En cuanto a los rubros que lideraron las subas, se destacan Educación, que debido al inicio de clases se disparó al 17,5%, y Alimentos y bebidas, que viene registrando en los últimos meses una evolución por encima del promedio. En marzo, no fue la excepción, ni siquiera a partir de la aplicación de precios máximos en 2.300 productos de consumo masivo; subió 3,9%. A su vez, Comunicación trepó 8,3% y prendas de vestir y calzado, 4,2 por ciento.
“Los meses de marzo son generalmente estacionalmente altos. Cuando lo analizás y lo comparás con otros marzo, no hubo un comportamiento muy distinto. La crisis claramente le agrega más distorsión y volatilidad. Pero era esperable que tuvieras aumentos altos en algunos rubros, como por ejemplo colegios o indumentaria, por el cambio de temporada. Además, hubo mucho aumento de productos estacionales", afirmó a Infobae el titular del organismo, Marco Lavagna.
En su informe, el Indec aclaró que el aislamiento dispuesto por el Gobierno “alteró el normal desarrollo de los operativos de campo” para hacer las mediciones. El organismo estadístico señaló que “si bien la metodología del IPC contempla el tratamiento de los precios faltantes y no observados, el INDEC avanzó intensa y anticipadamente en la captura de datos y análisis de relevamiento por vías no presenciales tales como la consulta telefónica, el correo electrónico y la modalidad online”. También dijo que “los relevamientos presenciales de la última semana se adelantaron, al mismo tiempo que se analizaban formatos de captura alternativos para reemplazar las fuentes primarias de información”.
Al respecto, Lavagna sostuvo que no tuvieron casi problemas en marzo porque sólo hubo pocos días hábiles con los negocios cerrados, ya que la cuarentena se dispuso el 20, pero abril será más difícil, ya que “las restricciones estarán a la orden del día”. De todos modos, remarcó que la metodología seguirá siendo igual de rigurosa y confiable y que los precios que no puedan medirse, se imputarán y volverán a registrarse cuando la actividad vuelva a la normalidad.
Por debajo del promedio, se ubicaron los rubros Equipamiento y mantenimiento del hogar, con un alza del 2,9%; bebidas alcohólicas y tabaco (2,9%); Salud (2,7%); Recreación y cultura (2,5%); Restaurantes y hoteles (2,2%); Bienes y servicios varios (2%); Transporte (1,6%); y Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (1,4%).
El aumento en Educación se debió a la actualización de las cuotas en todos los niveles de enseñanza, mientras que el alza en Comunicación se explica por aumentos en telefonía fija, móvil e internet. El Indec afirmó que las subas en telefonía se retrotrajeron en los últimos días de marzo, lo cual redujo su incidencia en la división.
El IPC núcleo fue del 3,1%, mientras que los regulados treparon 3,3% y los estacionales, 4,9%. Puntualmente, se destacaron aumentos en frutas y verduras, tubérculos y legumbres. Estos incrementos, junto con la observada en carnes, explicaron el alza del rubro Alimentos y Bebidas no Alcohólicas, que fue la de mayor incidencia en todas las regiones, destacó el organismo que conduce Lavagna.
Como se trató de un mes de difícil medición, las consultoras económicas reflejaron diferencias importantes en sus números de marzo. En lo que todas coincidieron fue en que los alimentos y bebidas volvieron a subir más que el promedio, pero la dispersión osciló entre el 2,3% que reflejó Elypsis, por ejemplo, y el 3,6% que indicó Ferreres & Asociados.
De acuerdo con el informe de Elypsis, “la aceleración estuvo explicada por productos estacionales como verduras, carnes o azúcar, que debido a restricciones de oferta o desabastecimiento”, producto del aislamiento obligatorio, aceleraron el ritmo de aumento. Para esta consultora, alimentos y bebidas trepó 2,5% en el mes y los mayores incrementos se produjeron en la última semana de marzo, influenciados por “algunos problemas de abastecimiento".
Y son estos problemas los que, según algunos analistas, harán que la inflación tienda a acelerarse en los próximos meses. El economista de Ecolatina, Matías Rajnerman, aseguró que marzo registró una suba de precios de 2,6%, producto de las subas en educación, indumentaria y alimentos y bebidas, y que en los meses siguientes “habrá una aceleración de los precios vinculada a la cuarentena y a los problemas logísticos que encarecen los costos”.
De todos modos, el analista planteó que no ven en la consultora riesgo de hiperinflación y que mientras que los tipos de cambio paralelos -que superaron los $100 por dólar- no sirvan para el comercio exterior, tienen un impacto acotado en la inflación.
Fuente: Infobae