El número de muertos por las inundaciones de Texas ascendió a 80 este domingo, entre ellas 21 menores. En tanto, las autoridades continúan con la búsqueda de las niñas desaparecidas de un campamento.
En este marco, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró emergencia por desastre natural para atender a las víctimas.
"Estas familias están sobrellevando una tragedia inimaginable, se han perdido muchas vidas y muchos más siguen desaparecidos", escribió el mandatario en su red social Truth Social.
La decisión de Trump permite que la Agencia Federal de Manejo de Emergencia (FEMA) se active en la zona para apoyar a las autoridades locales y estatales, según indicó la secretaria de Seguridad Nacional (DHS), Kristi Noem, en un comunicado.
Larry Leitha, sheriff del condado de Kerr, en Texas Hill Country, epicentro de las inundaciones, dijo que 11 niñas y una monitora siguen desaparecidas de un campamento cercano al río Guadalupe, que se desbordó tras las lluvias torrenciales caídas en la zona central de Texas el viernes, festividad del Día de la Independencia de Estados Unidos.
En Kerr, más de 400 socorristas de 20 agencias distintas del gobierno federal y estatal continúan con las labores de búsqueda y rescate.
Leitha dijo que hay 18 adultos y cuatro niños pendientes de identificación. No dijo si esas 22 personas están incluidas en el recuento de fallecidos.
Inundaciones en Texas deja al menos 67 muertos y decenas de desaparecidos
Las autoridades informaron ayer que más de 850 personas fueron rescatadas, algunas de ellas aferradas a los árboles, después de que una repentina tormenta descargó hasta 38 centímetros de lluvia en la zona de Texas Hill Country, a unos 140 kilómetros al noroeste de San Antonio. No estaba claro cuántas personas seguían desaparecidas en la zona. “Todo el mundo en la comunidad está sufriendo”, dijo Leitha a los periodistas.
Algunos expertos cuestionaron si los recortes a la fuerza de trabajo federal por parte del gobierno, incluida la agencia que supervisa el Servicio Meteorológico Nacional, hicieron que los funcionarios no pudieran predecir con precisión la gravedad de las inundaciones y emitir advertencias adecuadas antes de la tormenta.