En el cuarto día de protestas en Francia tras la muerte de un joven de 17 años en manos de un Policía, se detuvieron a más de 1200 personas que salieron a protestar. Ante esto, se desplegó un trabajo de Gendarmería, pero el Gobierno aún no declaró estado de emergencia.
La ola de disturbios comenzó el miércoles luego de la muerte de Nahel por un tiro de un policía en un control. Por eso se generaron las protestas que derivaron en un fuerte accionar de efectivos, pero la gente se resiste.
Fueron 45 mil los efectivos y 5 mil más que el día anterior. Particularmente en la cuarta noche, el Ministerio del Interior confirmó que se detuvieron 994 personas en toda Francia. Pero que hay heridos 79 policías y gendarmes.
Se dejó constatado que quemaron 1300 vehículos, 234 edificios quedaron calcinados y 2500 incendios en la vía pública. Ante esto, algunas localidades declararon toques de queda y los transportes no funcionan durante una parte del día.
Esto produjo una reunión del presidente Emmanuel Macron por segunda vez para intentar buscar soluciones al reclamo.
